¿Pura raza o vigor híbrido?

Que nadie crea que por comprar una raza en concreto tiene asegurado un determinado carácter. Aunque es cierto que suelen salir del mismo palo, igual que del mismo aspecto, luego hay individuos para todos los gustos. Eso sin contar con que la educación influye mucho. Aunque todo el mundo tiene derecho a tener caprichos, el consejo que le doy a todo el mundo es que pase por una buena protectora, cuente para qué quiere el perro y como es su estilo de vida y se deje aconsejar. No le van a engañar, ellos son los primeros interesados en que nazca una feliz relación interespecies. En las protectoras hay mestizos de todos los tipos, colores, caracteres y tamaños. Seguro que su perro ideal la está esperando allí. Se lo darán vacunado, probablemente esterilizado si es adulto y con análisis hechos.

Además, hay una cosa que se llama vigor híbrido y que hará que tenga menos disgustos y gaste mucho menos en veterinarios que si adquiere un perro de raza. No, no es un cuento chino. El gran, gran, gran problema con casi la totalidad de los criadores (eventuales y profesionales), es que se preocupan de que los cachorros salgan: 1º bonitos, 2º con buen carácter y 3º sanos, cuando debería ser justo en el orden inverso. Haga la prueba, coja cualquier libro de raza y verá un apartado dedicado a las enfermedades típicas de esa raza en concreto. Por eso el gobierno debería meter mano a todo aquel que críe y hacerle pagar los impuestos pertinentes, así como a someterse a los controles del club de su raza, para erradicar ejemplares con mal carácter o enfermedades hereditarias y evitar que se crucen líneas de sangre inapropiadas.

Precisamente a causa de todo esto, si aún así desea darse el capricho de comprar un perro de una raza determinada, hágase y háganos el favor de acudir a un buen criador. Puede que resulta más caro que comprar un perro anunciado en Segunda Mano o traído de Europa del Este y expuesto en una tienda, pero es muy probable que a la larga salga más barato. Además, estará ayudando a frenar la irresponsabilidad de muchos particulares y a muchos desalmados que crían en condiciones terribles en pro del lucro fácil.